Comida que se mueve una nueva forma de arte gastronómico

Con técnicas avanzadas de biología sintética, se ha logrado tener comida que se mueve, comida viva. Esta propuesta la ha hecho Minsu Kim, quien ha logrado hacer que la comida se mueva tanto en el plato como en la boca. Se inspiró en el hecho de sentir más sabor y nuevas experiencias. Lo que ha planteado es que si la comida se suponía que se comiera cruda, o bien, viva, quizá haya sido por algo. Comer algo vivo en sus orígenes tendría el propósito de aumentar las sensaciones en la boca y mejorar el sabor. Si uno aumenta su sensibilidad hacia el sabor, textura o movimiento entonces también podría aumentar su gusto por los nutrientes.

¿Cómo lo logra?

Inserta células biosintéticas que tienen como orden moverse de tal forma. La biología sintética es una disciplina muy compleja, mezcla la biología, la química y la ingeniería. Esta rama de la ciencia crea microorganismos programables, células que hacen lo que uno les dice que haga, como una computadora. Esto es posible tomando como base códigos genéticos (es decir el ADN) de células ya existentes y modificándolos de tal forma que no sea como un cromosoma sino como circuito genético. Es posible acomodar los genes para que funcionen como circuitos eléctricos, solo que en lugar de transmitir electrones por la red, se regulan mediante represores. Así uno puede hacer que esos genes generen las proteínas deseadas y la cantidad necesaria.