Es un hecho bien conocido en la industria restaurantera que el menú es la herramienta de marketing más eficaz.
El menú del restaurante no sólo tiene que ser lo suficientemente interesante como para atraer a los clientes, también tiene que crear oportunidades para que consigas que los clientes hagan el mejor consumo posible.
No pienses en el menú de tu restaurante como una simple lista de precios que puedes escribir e imprimir en la computadora de tu casa.
Tu menú tiene que llamar la atención, vender tus productos más rentables, y aumentar las ventas del restaurante.

Te compartimos algunas pautas a seguir en el desarrollo o rediseño del menú:

  1. investiga qué platillos de tu menú son los mas vendidos.
    Lleva un registro de lo que ordenan frecuentemente tus clientes.
    ¿Es ese el platillo en tu menú también tu platillo más rentable? ¿O es el platillo menos rentable? Averigua qué platillos del menú generarán el mayor margen de ganancia para tu restaurante, y cuenta con ese platillo en tu menú resaltándolo, o haciéndolo el especial de la casa. Utiliza fotos y escribe descripciones atractivas para vender tus alimentos y bebidas.
  1. Que el menú no parezca una lista de precios.
    Si tu menú enumera todos los platillos en un lado de la página con una línea de puntos que conectan cada platillo a su respectivo precio, estás invitando a tus clientes a ordenar su comida basado en lo que cuestan. Este tipo de menú permite a los clientes comparar los precios de todos los platillos del menú, por lo que destaca involuntariamente todos tus platillos de menor precio.
    En cambio, escribe el precio en la descripción de el platillo de tu menú; No lo resaltes, o lo hagas de otro color. En pocas palabras, no quieres llamar la atención sobre el precio.
  1. No cambies tu menú tan seguido.
    Debes actualizar tu menú por temporada. Esto no quiere decir que necesitas un nuevo menú cada tres meses. Mantén todas tus especialidades y los favoritos de los clientes, pero también aprovecha la oportunidad para probar nuevos platillos ofreciéndolos como aperitivos; si consiguen buenas críticas, luego hazlos entradas en la próxima revisión del menú.
    También puedes ofrecer platos del día. Considera agregar al menú permanentemente los platillos que recibieron la mejor aceptación.
  1. No tengas un menú demasiado extenso para tratar de complacer a todo el mundo.
    Uno de los mayores errores que los restauranteros cometen es tratar de poner demasiadas cosas en el menú para tratar de complacer a todos.
    Un menú no está destinado a ser un libro. Demasiadas platillos confundirán a tus clientes, y convertirán una buena cena en una frustración; además de lo que conlleva la preparación y costes de inventario en tu restaurante
  1. Haz que reconozcan tu marca.
    Asegúrate de que el diseño y la sensación de el menú sea coherente con tu marca. ¿El tipo de letra, colores y contenido le dan a tus clientes una sensación de qué tipo de restaurante quieres ser y de lo que deseas trasmitir?
  1. No ofrezcas precios altos.
    Asegúrate de que tus precios sean competitivos con otros restaurantes. Considera la posibilidad de subir los precios de las bebidas y de bajar los de los alimentos. Los clientes son más propensos a prestar más atención a los precios de la comida, en lugar del precio de las bebidas.
    Ten en cuenta que los clientes no están en busca de comida barata. Ellos están buscando un mejor valor por su dinero.manual
  1. Usa menús separados para las bebidas y postres.
    Utiliza los menús separados con grandes fotos de tus bebidas especiales y postres. Estos artículos pueden perderse en tu menú principal, pero se destacan cuando se presenta por separado. Pon la carta de bebidas y postres en la mesa, para que los clientes tengan la oportunidad de observarlo antes de que se pasen al menú principal.
    Cuando sea la hora del postre, ellos todavía tendrán esa imagen en la cabeza de los deliciosos postres que vieron la primera vez cuando se sentaron en la mesa.
  1. Contrata a un Experto.
    Si crees que tu menú podría mejorar y no te sientes seguro de cómo lograrlo, considera contratar a un consultor en diseño para que te asesore. A veces, algunos cambios simples a un menú podrían hacer más ganancias para ti.
    Y sobre todo pon manos a la obra, toma acción inmediata y comienza por una revisión a los precios de tu menú y condiciones estética (es muy desagradable encontrarse con menús rotos o con manchas).

Cuando fue la última vez que cambiaste el menú de tu restaurante?