No hay que ser astronauta ni cirquero; pero ser mesero es uno de los trabajos más duros que existen; en el cual se pueden obtener buenas ganancias si lo hacen bien.
Los meseros exitosos tienen un gran respeto en dentro del gremio restaurantero y se lo han ganado a pulso.

Te compartimos 10 consejos que todo mesero en tu restaurante debe poner en práctica para mantener sus bolsillos repletos de propinas:

  1. Mantén una apariencia impecable.
    La primera impresión es la que cuenta y los clientes te juzgarán por tu apariencia. Asegúrate de que tu cabello está limpio, que el cabello largo esté bien peinado y fuera de tu cara. Mantén las uñas cuidadosamente recortadas y nunca uses un mandil sucio. Uso de loción moderada y zapatos perfectamente limpios.
  1. Conoce el menú
    Y realmente conócelo, por dentro y por fuera. Sé capaz de responder a preguntas sobre los ingredientes de los platillos te vas a topar con clientes preguntones, vegetarianos o que sean alérgicos a algunos de los alimentos. Esto incliye todos los tipos de menús: comida, bebidas, vinos y de los niños. Si no sabes la respuesta, rápidamente averíguala y responde con certeza. Esto te ayudará para hacer sugerencias de los platillos más rentables que te generarán mayores propinas.
  1. Respeta el tiempo de tus clientes.
    Saluda de inmediato a los clientes y nunca los dejes en espera o preguntándose dónde te encuentras. Recuerda, ellos decidieron venir y gastar su dinero en el restaurante, así que haz que valga la pena. Ofrece una bebida dentro de los primeros dos minutos. Menciona las especialidades, el menú de bebidas. Vuelve después de que la comida se haya entregado para garantizar que todo el mundo está satisfecho y que no requieren algo. Evita iniciar conversaciones personales acerca de ti y sé rápido con la cuenta cuando te lo pidan.
  1. Recuerda el orden donde se sientan.
    Imagina cada mesa como un reloj y mentalmente asigna a un cliente como si estuviera sentado a las 12 horas; Y hacia la derecha, asigna a los otros clientes con un número en la cara del reloj. Anota cada orden como las 12:00 pollo, 01:00 pasta, 02:00 sándwich, etcétera. De esta manera evitarás preguntar «quien ordenó la …» cuando la comida este lista.
  1. Recuerda a los clientes frecuentes.
    Tener clientes que regresen frecuentemente a tu restaurante, es el objetivo principal de la mayoría de los restauranteros. Si reconoces a alguien de una visita anterior, asegúrate de escribir su nombre (de la tarjeta de crédito o reservación), así como cuáles son sus bebidas y platillos preferidos del menú. Esto te servirá mucho para sus próximas visitas y se sentirá contento de que lo recuerdes.
  1. Trabaja en equipo.
    Durante las horas más concurridas de servicio, la entrega de alimentos y bebidas se pueden retrasar. Si tienes una mano libre al caminar desde las mesas a la cocina, recoge algún plato vacío o, si estás en la cocina y ves a un compañero batallando con un gran pedido de comida, échale una mano. No confíes en el personal de apoyo para hacer todo el trabajo pesado.
  1. Estar disponible.
    No hay duda al respecto; Los fines de semana son los mejores días de ganancia para los restaurantes. El éxito radica en tu capacidad de tener una actitud positiva en los momentos de mayor trabajo sin faltar a tu jornada laboral.
  1. Sonríe y sé amable.
    Esto puede sonarte cursi, pero tiene que ser natural. Sonríe cada vez que te acerques a una mesa. Habrá momentos en los que los clientes difíciles pondrá a prueba tu personalidad. Si un cliente esta inconforme con tu servicio, busca la ayuda de tu superior de inmediato, no lo enfrentes, se tolerante; recuerda que otras mesas todavía pueden verte. Evita el coqueteo, a ningún esposo o novia le parecerá correcto demasiadas atenciones con su pareja de parte del mesero, sólo se cortés.
  1. Presta atención a los niños.
    Dale toda la atención que puedas a los peques en la mayoría de los casos ellos influyen en la decisión de que restaurante visitar. Sé consciente de donde colocas objetos puntiagudos, calientes o cualquier otro objeto que pueda causar daño en caso de un descuido. Busca un gesto de aprobación de los padres cuando los niños ordenan por su cuenta. Deja que los padres sepan que estás de su lado y sin decepcionar al niño.
  1. Siempre mantente presente.
    Permanece tan visible y tan atento como sea posible a tus mesas. Vasos vacíos, tiempo de espera de los platillos. Comunica con anticipación si un platillo se tardará más. Si la cocina prepara un platillo de forma incorrecta, hazle saber a tu mesa de inmediato. Recuerda que las personas en la mesa están pagando y nunca los dejes esperando ni los evites.

Toma esto siempre en cuenta: Se honesto a la hora de reportar las propinas, recuerda que es un trabajo en equipo y que el personal de cocina también espera recibir una parte de lo recaudado.

El menú ayuda a dirigir a los clientes en la dirección correcta pero los meseros son los que realmente cierran la venta. Adelante y Éxito!