De tantos Restaurantes que hay en el mundo y la gran variedad de estilos y comidas no faltan los restaurantes que tocan en extremo o estrafalario con tal de llevar al cliente a una experiencia culinaria única, al fin de cuentas ese es uno de los propósitos de la restauración , “hacer que el comensal viva una experiencia gastronómica única e inolvidable”
El sitio web de Food Republic publicó un listado con seis restaurantes que, no solo son únicos, sino que además son peligrosos.
6.- Fortezza Medicea, en la ciudad italiana de Volterra. No sólo es exclusiva, con mesas para un máximo de 120 personas, sino que además es una prisión de alta seguridad, donde cocinan los mismos presos, condenados por asesinato y robo armado.Además, es un convicto con dotes musicales el que ameniza la comida tocando el piano, mientras 20 guardias lo vigilan.
5.- Dans Le Noir en Nueva York. Se trata de una franquicia francesa en la que los comensales comen en comedores que se encuentran en absoluta oscuridad. No saben qué están comiendo, y se deben sentar en una mesa común con 72 personas.
4.- Dinner in the sky, que eleva a los comensales a varios metros de altura, tras haber firmado un contrato en el que no responsabilizan al restaurant por cualquier accidente. En enero de 2009, Dinner in the sky estuvo en Viña del Mar.
3.-Ka-Tron Flying Chicken, donde el pollo frito no se sirve de manera convencional. Los cocineros lanzan el pollo envuelto en papel de aluminio a un mozo, quien anda en un monociclo con un casco que en su parte superior tiene una punta metálica. La idea es que el mozo atrape el pollo con su casco y lo lleve a la mesa.
2.-Poogan’s Poch, un restaurant con una extraña compañía. Se supone que la fundadora se suicidó hace 100 años y su fantasma monitorea que la comida se haga como se debe. Su figura ha sido vista tantas veces que la policía ya no llega cuando las visitas llaman, asustados.
1.- Disaster Café, en la localidad española Llorent de Mar. Como su nombre lo dice, la idea es simular desastres naturales, en especial el terremoto. Por esto, todas las noches el piso del lugar se mueve como si estuviera pasando por un sismo de 7,8 grados Richter. Por esto, los meseros usan trajes especiales que incluyen cascos, y los comensales deben ir preparados para ensuciar su ropa.